Como no podía ser de otra manera vamos a analizar la boda de Meghan Markle y el Príncipe Harry. Desde La Quinta de Jarama os vamos a decir todas las curiosidades y os vamos a enseñar todos los outfits de esta gran boda tan esperada.
Esas miradas… que alguien te mire como Harry mira a Meghan y viceversa. Desde que llegaron a la iglesia todo estuvo rodeado de amor y de sentimientos sinceros. Las primeras palabras de Harry al ver a Meghan fueron «Estás impresionante! Soy muy afortunado!»
Entrar sola a la iglesia, un acto de independencia, de fuerza y poder. Ya que su padre no acudió a la boda, decidió dejar estas imágenes para el recuerdo. Fue la primera vez en la historia, que en una boda real, la novia entraba sola en la iglesia. Aquí vemos un gran paso hacia el futuro y un gran cambio de la casa real.
Al acabar el pasillo de los invitados el Principe Carlos fue a su encuentro para llevarla hasta el lado de Harry.
El vestido de la novia, diseño de Clare Waight Keller por Givenchy, fue un diseño elegante, sencillo pero muy Meghan. Con cuello barco que le favorece muchísimo, vestido semi-entallado y un cola infinita combinado con un velo bordado en sus extremidades. ¡Todo un acierto!
¿Pero y qué me decís de la decoración floral? ¿No es para morirse? Ese arco verde y blanco, todos los rincones con abundantes flores. Me dejo sin palabras. Obra de Philippa Craddock. Una obra maestra.
El ramo, un poco pequeño, pero al saber que se lo hizo Harry el día anterior con las flores favoritas de Diana…. ¿no os morís de amor?
El maquillaje que eligió Meghan fue muy natural. ¡Ella no necesita nada más! El «algo prestado» fue la tiara que la reina Isabel II le prestó de su abuela. ¡Muy buena elección. Llevaba también una anillos y pulsera de diamantes muy discretos y sencillos. Ya sabemos de dónde ha sacado Meghan su belleza, de su madre Doria Ragland.
Y aquí llego el momento más esperado del día, el ansiado beso.
Hubo muchos invitados y de diferentes sectores como deportistas, presentadores, cómicos, actores, cantantes… Los colores que predominaron fueron los rosa palo o rosa maquillaje y el azul en todas sus tonalidades. La reina, como no, se vistió con un abrigo verde lima con sombrero a juego, así no le pierden de vista. Kate iba de una amarillo casi blanco muy elegante y los pajes iban ideales: las niñas de blanco y los niños de negro.
Estas son las foto reales del enlace. No podían estar más sonrientes. Llega una nueva era a la casa real.
No podemos dejar de comentar el outfit del príncipe Harry. Parece recién salido de una película de Hollywood. ¡Estaba impresionante! Consiguió que todas las miradas se posarán en él.
Si el primer vestido fue un acierto, ¿que opináis de este? es para enamorarse a primera vista. Fue un diseño de Estella McCartney. Marcaba la espectacular silueta de Meghan, dejando al aire sus bonitos hombros y atado al cuello. También tenemos que destacar el preciosos anillo en color aguamarina que Meghan lleva en la última foto, regalo de boda de su marido y que perteneció a su madre Diana.
Un detalle que tampoco podemos dejar de contar, es que la matricula del Jaguar que les llevo a la segunda fiesta, estaba personalizada con la fecha de la boda E190518. Otro romántico detalle.
Fue una boda llena de detalles, reflejos de Diana y amor, mucho amor por todos los rincones. Hasta el día de hoy podemos decir que ha sido la boda real más bonita de la historia.
Sólo nos queda decir, ¡Qué vivan los novios!
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¡Feliz día a tod@s!
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